Si no queda otra que un volantazo

- ASUNTOS DE FONDO

Si no queda otra que un volantazo
Si no queda otra que un volantazo

La sustitución de etiquetas en relación a China le permitió a la administración libretaria mantener una vela encendida. El reseteo presidencial respecto al gobierno de Xi Jinping fue decodificado como un respiro, a partir del comienzo de 2025. Hasta tanto, al gobierno criollo le quedan decenas de inconvenientes por solucionar.


#LibeltadSeAllastra

No por repentino deja de ser llamativo el afecto presidencial hacia China, economía hacia la cual serán redirigidas las súplicas tendientes a lograr un salvataje financiero. El propio Javier Milei definió el último domingo a este recurso como un liso y llano “mangueo” ante el gobierno de Xi Jinping, previo al viaje oficial que apura concretar hacia enero próximo.

La administración bajo el mando libretario requiere la obtención de unos u$s 20.500 millones, entre los pagos por deuda e intereses a completar en el último tramo de este año y los vencimientos previstos hacia el siguiente. Cantidad que puede desglosarse en u$s 3.000 millones destinados a saldar en las semanas venideras compromisos antes de finalizar 2024, mientras u$s 17.500 millones para los de 2025.

En el trayecto y tras percibir que el grifo no será abierto desde el idílico hemisferio occidental -principalmente EEUU- el mandatario empezó a ver con buenos ojos al gobierno con sede en Beijing. El mismo que Milei había encuadrado como estandarte del zurdaje ´empobrecedor´ un año atrás, pero que en pocas semanas inaugurará el mega puerto de Chancay (Perú), a 75 kilómetros de Lima, inversión que representó u$s 3.000 millones.

Pese a su declamación de no “negociar mi moral a cambio de dinero” versión 2023, se reconvirtió a que se sorprendió “gratamente con China”, confesó pocas horas atrás en Telefé. Y consideró a esta nación asiática “un socio comercial muy interesante porque ellos no exigen nada. Lo único que piden es que no los molesten”, resumió en la mencionada participación televisiva.

El Jefe de Estado remarcó la buena predisposición china, al momento de renovar el crédito swap en junio pasado, permitiéndole a Casa Rosada eludir la cesación de pagos. Acerca de aquellos días, Milei rememoró que todo se resumió en “una reunión con el embajador y al otro día nos destrabaron el swap”, el que posibilitó cancelar compromisos con organismos internacionales y esquivar un default.

De hecho, los avances tecnológicos proyectan que la economía china en breve será la primera a nivel mundial. En enero próximo, Milei participará en China de un encuentro organizado por la Comisión Económica para América Latina, donde se debatirán asuntos fundamentales para la cooperación entre las economías emergentes y las de mayor complejidad [NdR: es decir, las que asignan mayor inversión a Investigación y Desarrollo I+D].

Es evidente que una luz de expectativas se abre con este viraje admitido por Milei, en cuanto a las posibilidades y perspectivas a futuro de la producción y la economía argentina. Aunque hasta que eso suceda quedan por resolver problemas estructurales en cuanto a la distribución de ingresos, haberes jubilatorios, inversión en educación superior y reversión del camino primarizante a la producción criolla (intensificada por la actual gestión).

En estos 90 días de gestión, no es poca la tarea que tiene por delante la gestión mileidista iniciada con lanzallamas hacia diversas direcciones. Pero en el camino, las señales y la flama con la que arremetió al inicio aconsejaron un cambio de rumbo. 


NdR, 30 de septiembre de 2024.

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