#MediaHechaPelota
M.R.
La gestión de Marco Lavagna al frente del INDEC podrá resultar inconsistente hasta para su madre, pero no es tema irradiado hacia el resto de la población. La última tropelía del organismo estadístico fue asignarle imaginarios salariazos al sector informal que, de ser cierto, habría generado un boom de consumo.
Tanto que este lunes el economista Mariano Kestelboim resumió como algo “delirante” la inventiva del Instituto Nacional de Estadísticas y Censo. Si aún existe alguien capaz de dar crédito a este dibujo, más del 50 % de los trabajadores que se ven obligados a estar en la informalidad le hicieron pito catalán a la inflación, durante los últimos 24 meses de mileidismo.
De acuerdo al último informe dado a conocer por Lavagna, los ingresos de los informales treparon un 538 %, en un contexto en que la inflación fue apenas del 285 %. A partir de esta ficción aritmética es que el presidente Javier Milei se monta cada vez que proclama aquellos 13 millones de argentinos que su gestión rescató de la pobreza.
En contraposición, Kestelboim distinguió que “la gran diferencia con la época del INDEC de Moreno es que este papelón no se denuncia a viva voz e insistentemente en los grandes medios”.
En perspectiva, el economista resumió que entre el mes de octubre de 2023 y octubre de 2025, “los asalariados registrados del sector privado tuvieron un incremento salarial promedio del 272%, los del sector público del 215% y, asombrosamente, los trabajadores informales del 538%, según los datos oficiales”.
Al respecto, el especialista concluyó en X que la decodificación de semejante embuste se resume en una cuestión de fe o de estupidez. En síntesis, “creer o reventar”, en cuanto a que “los trabajadores en negro consiguieron más que duplicar la suba de los salarios formales y que vencieron por 253 puntos a la inflación acumulada en el mismo período (285%)”.
De manera tal, si acaso alguien diera crédito a estas chapucerías y partiendo de la cada vez más nutrida tropa de obreros informales “deberíamos estar viviendo una fiesta de consumo masivo como nunca en la historia”, pues “jamás un sector social tan representativo tuvo una mejora salarial así de impresionante”.
En contraste, Kestelboim advirtió que la gestión violeta derribó el poder adquisitivo de los sectores medios y atacó duramente el empleo de calidad. En un contexto en el cual, además se vino abajo la demanda interna y se dejó flotar el precio de los insumos para la producción, al igual que servicios como el “combustible y la salud”.
En ocasión de los recientes festejos navideños, el sector panadero alertó acerca de la crisis que vive este segmento productivo. En función del derrumbe del consumo (derivado de la caída del poder adquisitivo) hasta acá ya cerraron 15,000 panaderías en nuestro país, en tanto peligra otro tanto de establecimientos por los tarifazos de 50 % en el servicio de electricidad. Y va para peor. 
NdR, 29 de diciembre de 2025.