#TeApuestoDiezKueider
F:P.
Un final parlamentario de novela prometen el kirchnerismo y el mileidismo, subidos al cuadrilátero como los principales contendientes de la política gaucha. En torno al caso Kueider, estos equipos aguardan con sendos mandobles para intercambiar desde acá hasta el próximo jueves -12 de diciembre- en Cámara alta nacional. En un análisis de las respectivas fichas prontuariales, aunque en el caso del legislador entrerriano la gran diferencia pasa por la flagrancia.
Es conocida la moción del bloque peronista -no peluca- de pedir la expulsión lisa y llana de Kueider, entronizado por el mileidismo como presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales. Para lo cual, los senadores enlistados en Unión por la Patria invocaron la operatividad del artículo 66 de la Constitución Nacional (inhabilidad moral) al protagonista del escándalo internacional, hoy detenido en Paraguay.
A falta de una excusa con cierta solidez, el oficialismo amagó un contrataque por medio de redes sociales exhortando a una especie de turba moralizante. Parcialmente emparentada con el avance que intenta borrar la letra constitucional sobre presunción de inocencia, el concepto de Ficha Limpia, Casa Rosada inició este rotor con la media enchastrada.
De manera tal, pensaron a las apuradas los guionistas libretarios que si liman y se pasa escofina a las filosas astillas del excursionista por la Triple Frontera el caso Kueider podría quedar empardado con cualquier otra denuncia a un legislador. Sobre todo opositor, pero sin entrar en el detalle -nada menor- que el entrerriano fue pescado in fraganti. Un rasgo que podría inmiscuirlo en el apartado señalado en el artículo 69 de la Constitución Nacional.
La dificultad en aplicar esa nebulosa oscura que constituye Ficha Limpia radica en que cuanto mayor fuese la virulencia con que se plantearan denuncias judiciales hacia un dirigente, podría incrementarse la opción de marginarlo de la actividad política. O sea, bastaría una ristra de presentaciones y la intervención, más desde el catastro de lo inverosímil antes que del Derecho, por parte de un juez dispuesto a prestar ese servicio.
En contraste, los agentes aduaneros paraguayos detuvieron a mitad de semana a Edgardo Kueider con las manos en la masa, es decir, sobre los fajos con u$s 200 mil dólares. Lo balbuceado por el parlamentario litoraleño en cuanto a la procedencia de esos billetes color esmeralda no hizo más que incrementar las sospechas, por parte de los pesquisas guaraníes.
Un mimado del mileidismo desde los servicios prestados en la aprobación de la Ley Bases, habilitando a cualquier tropelía desde Casa Rosada, no hay dudas que esta réplica en contra de quienes impulsan su destitución es para amedrentar querellantes. Mucho más, si se tiene en cuenta que la destitución de Kueider habilitaría el ingreso de Sofía Cora como su relevo en esta banca. Una camporista para el reemplazo, además de números en la Cámara alta que se tornarían desfavorables para el oficialismo. 
NdR, 7 de diciembre de 2024.