#BancoDeSuplentes
F.P.
El fiscal federal Eduardo Villalba introdujo en estos días la mejor descarga a tierra al electrificado conducto nervioso saenziano, hasta el punto de ser considerado incluso en medio del zarandeo en el gabinete provincial. El funcionario nacional dio pasos en firme sobre el caso María Cash, con lo cual opacó el tambaleo provincial en Seguridad (por el avance narcocriminal).
Aún así que las pesquisas comandadas por Villalba se basaron en una retrospectiva ha 13 años atrás, escudriñando evoluciones testimoniales ya registradas por la justicia gaucha. Con todos los achaques por aparente ineptitud que implica en quienes lo antecedieron en esta tarea, principalmente desde la justicia provincial y en menor medida en el fuero federal.
Tras lo cual, los procedimientos restantes destinados a dilucidar las últimas exhalaciones de la joven porteña se focalizarán en los 39 kilómetros que separan la localidad de El Tunal, de Joaquín V. González. El Fiscal federal fundó su hipótesis de trabajo en la incongruencia testimonial suministrada por el camionero Héctor Romero, detenido la semana anterior en la zona norte de nuestra capital.
El conductor, antes de jubilarse trabajaba para la cadena de Supermercados “Miguelito” que tiene sucursales en General Güemes y en Joaquín V. González, fue el último con quien María Cash tuvo contacto. El rastreo de sus declaraciones -entre 2011, 2019 y 2024- dio imprecisiones sospechosas a ojos de Villalba. Principalmente, porque la joven diseñadora textil se dirigía en dirección norte hacia Jujuy, en contraposición al camionero, quien cubría el recorrido hacia el sudeste provincial.
El hermano de la muchacha, Máximo Cash, aportó a esta etapa de la investigación un testimonio anónimo que podría ser revelador. Según le dijo esta voz femenina al hermano de María, el cuerpo habría sido arrojado al espejo de agua situado en el dique El Tunal, dato que anteriormente fu mal investigado.
Por ello, a las fuerzas federales y hasta a la SIDE se encomendó determinar la factibilidad (por medio de la profundidad y características del fondo lacustre) que el cuerpo de Cash se hubiese arrojado allí. Lo cual habría ocurrido, de acuerdo a esta conjetura, entre las primeras horas y el atardecer del 8 de julio de 2011 cuando a las 19 horas de ese día -cuando desaparecía María Cash- Romero arribó a Joaquín V. González.
El conductor regresó aquel mismo día a las 22 horas a la ciudad de General Güemes, después de efectuar la descarga de productos en la mencionada ciudad sudesteña. Por este motivo, la SIDE interceptó contactos telefónicos y mensajes entre Romero, sus familiares y ex compañeros de trabajo, tanto en Güemes como en JVG.
Frente a la posibilidad de resolución de uno de los casos más resonantes ocurridos en nuestra provincia, durante la era U [NdR: los otros fueron el doble homicidio de las jóvenes francesas Houria Mounmi y Cassandre Bouvier, además del caso Luján y Yanina], el resoplar del oficialismo es estentóreo. Y en el desempeño de Eduardo Villalba el oficialismo local encontró un bálsamo en el cual tomar aire. 
NdR, 30 de noviembre de 2024.