#SemoComoSemo
F.P.
La diversificación del pejotismo opositor y la variante de PJ bisoñé quedó expuesta al aire libre este lunes, mientras se mantiene la incertidumbre acerca del futuro de este partido. La cumbre entre Jorge Yoma, apoderado de la lista encabezada por Ricardo Quintela, y el Jefe de Gabinete Guillermo Francos resultó elocuente a este respecto.
En las alforjas del mileidismo parece no haber nada para el norte del país, al igual que para la región cuyana, el centro del país y los distritos patagónicos, pero el oficialismo sigue firme en la búsqueda de aliados por fuera de borda. En este caso, las inferencias en torno a la cumbre Yoma-Francos fueron en esa dirección y aclararon el panorama sobre los forasteros en la fuerza política inspirada en la doctrina de Juan D. Perón.
Este encuentro se dio en paralelo a la advertencia de Quintela de acudir a la justicia electoral, luego de la no oficialización dispuesta por la Junta Electoral (basó esta disposición en la falta de 14.000 avales). Lo cual dejó al sector “Federales, un grito de corazón” más cerca de la resolución de un match en los escritorios, antes que frente a la posibilidad de medirse con Cristina Fernández de Kirchner en una contienda interna.
Al menos, Yoma encuadró su encuentro con el Coordinador de Ministerios en el reclamo de la provincia gobernada por Quintela y calculado en u$s 320 millones que les deben en Casa Rosada. Claro que en medio de conjeturas horripilantes en el medio, empezando por la reedición de la controversia peruca 2018, la cual desembocó en la intervención judicial y la designación del “sindicalista” Luis Barrionuevo como titular normalizador.
Seis años más tarde y con otro gobierno de derechas en el medio, la división impulsada desde Balcarce 50 propende a confeccionar un catálogo con pejotistas puros y pejotistas bisoñé o pelucas. Entre los últimos se puede rastrear a la macilenta contribución hacia la lista “Federales” realizada desde Tucumán, Salta y San Luis.
Desde estos distritos temen al programa formulado por “Primero la Patria” en su intento por unificar la confederación de pejotismos provinciales que rigieron en los últimos 15 años. Es decir que esto supone una amenaza cierta para los respectivos gobiernos de tales distritos que sitúan al frente de los PJ provinciales a representantes que les responden sin chistar.
Así, desde las provincias norteñas no decayeron en el entusiasmo por encolumnarse detrás del mandatario riojano, si bien el aporte desde cada distrito fue entre desganado y macilento en peso de los dirigentes aportados. Y como no había mucho más, es probable que ahora redirijan su expectativa hacia una solución judicial, capaz de entronizar en la sede de calle Matheu 130 alguna figura afín al pejotismo bisoñé.
NdR, 28 de octubre de 2024.