#SeñueloEstadoInversiones
F.P.
La pechadera corporativa para acogerse al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones, en realidad parece arribar con remoloneos y arrastrando los Gomicuer por el suelo. Tan es así que a casi seis meses de haberse aprobado esta desgravación impositiva, financiera y cambiaria, recién este miércoles se anunció el primer proyecto encuadrado en esta norma.
Algo parecido a la afamada “lluvia de inversiones”, luego rebautizada “lluvia de invenciones”, con la que el macrismo había ingresado a paso redoblado al Ejecutivo nacional en 2015 para salir con las pestañas chamuscadas 4 años más tarde. En este caso, un protagonista en sendas gestiones, el titular del Palacio de Hacienda Luis Caputo alacraneó con el anuncio inaugural sobre el RIGI.
En realidad, se trata de un proyecto por u$s 211 millones a cargo del departamento YPF Luz -división de la petrolera estatal argentina- asociada con la firma Luz del Campo S.A. Se trata de la iniciativa para el Parque Solar El Quemado, situado en Las Heras (provincia de Mendoza) con el que la segunda integrante de esta UTE venía insistiendo hace un tiempo atrás cuando ni se hablaba del RIGI.
Por lo cual, todo indica que se trata de la adquisición de un proyecto previamente diseñado y hasta con fecha de inicio en julio de 2024, previo a la sanción de la ley un mes más tarde. Y la presencia en él de la compañía estatal de energía indica todo lo contrario de la prédica mileidiana y caputonista: la inversión pública haciendo la punta para marcarle el rumbo a los privados.
De acuerdo al detalle ofrecido este miércoles por el Ministerio de Economía de la nación, con esta guita se construirá un parque fotovoltaico que contará con capacidad instalada para generar 305 MW. Ello, en la localidad de Jocolí del departamento Las Heras, en este distrito tan M de la región cuyana.
A través de la Resolución 1/2025 publicada este 8 de enero en el Boletín Oficial Casa Rosada aprobó el montado del parque solar mencionado y le suministró aval gubernamental. Según el detalle ofrecido desde Yrigoyen 250 -bunker caputonista, la construcción consistirá en dos etapas: en la Nº 1, se instalarán paneles solares bifaciales en 350 hectáreas por una capacidad instalada de 200 MW, mientras que en la Nº 2 se prevé completar la capacidad total planeada.
Del total por u$s 211 millones y seiscientos mil, en el primer y segundo año se emplearán US$204.544.000, con lo cual se cumplirá con aquel “40% del monto mínimo de inversión definido para el sector de energía”, en la ley RIGI.
En cuanto al detalle, unos u$s 94.076.795 serán abonados a proveedores del exterior, mientras que la suma restante, unos u$s 117.523.278, se destinarán al pago a proveedores locales. Además, el gobierno fijó como fecha límite comprometida para alcanzar el monto mínimo de inversión en activos computables el próximo 30 de enero de 2027.
Al realizar la evaluación para determinar la viabilidad de la inversión, el Banco Central consideró que “no afecta la sostenibilidad del sector externo ni tampoco resulta significativo su impacto en las reservas internacionales”. Por otro lado, indicó que “no se considera que el proyecto pueda afectar negativamente, por sus efectos cambiarios, los objetivos de desarrollo económico y estabilidad financiera”.
Por añadidura, el BCRA especificó que en materia de sustitución de importaciones la puesta en funcionamiento de este parque solar arrojará un “balance cambiario (…) positivo considerando los tres años iniciales del proyecto, ya que los gastos de operación a partir de la puesta en marcha son locales”.
Por su parte, la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA) y la Secretaría de Energía evaluaron la iniciativa y concluyeron que la misma “cumple con los requisitos y objetivos del RIGI”. Por lo cual, sólo resta extender manos con las palmas hacia arriba, aguardando por los goles que la garganta mileidista se apresta a gritar. Como los de aquel delantero de equipo grande de fines de los 80, con apellido de planeta, y cuestionable puntería. 
NdR, 8 de enero de 2025.