#ADosBandas
F.P.
El segmento de la economía criolla que no destaca por las novedades es en el de consumo masivo, pues en marzo acumuló otro mes en caída. Así, este rubro sumó un 5,4 % -en negativo- adicional a los 15 meses de retroceso que lleva la administración ultra en el poder. Mientras, el horizonte macroeconómico asoma momentáneamente calmo, pero preocupante hacia el final del año.
Un reciente informe de la consultora Scentia develó el -5,4 % sufrido por el consumo en el tercer mes de 2025, medido en contraste con idéntico mes del año anterior. Aunque el punto de comparación es aún peor, dado que en marzo de 2024 la caída había sido de 7,4 % (medido a su vez contra marzo de 2023).
Desde su llegada a Balcarce 50 -diciembre de 2023- el mileidismo se transformó en señal perniciosa para la dieta y las cuentas hogareñas, primero, luego para el sector mercantil. Mucho peor aún porque el parámetro en rojo es el de los inicios de esta misma gestión, en lugar de hacerse respecto a la del anterior gobierno.
Usando una metodología con alta precisión, consistente en analizar los tickets de compras, Scentia especificó que la mayor caída fue en los establecimientos con gran superficie y algo menor en los comercios de cercanía. Así, los hipermercados tuvieron en marzo un derrumbe de 7,4 %, en tanto los mini mercados retrocedieron 3,7 % en sus despachos.
La preocupación respecto al consumo se instaló con la nueva devaluación ocurrida hace menos de una semana atrás, cuando el gobierno desarmó el origami cambiario y aceptó el nuevo esquema de bandas para la regulación del dólar estadounidense. Con una depreciación del peso susceptible de andar entre el 28% y el 30%, se resentirá aún más el poder adquisitivo de los salarios.
En este contexto fue que el ministro Luis Caputo (Economía) realizó en X publicaciones laudatorias hacia un par de cadenas de supermercados, las que rechazaron listas de precios con incrementos excesivos. En contraposición, el titular de Yrigoyen 250 (sede del palacio de Hacienda) anunció el final del “parking” para fondos de inversión ultra especulativos, pero a la vez les dio otra señal para permanecer al menos hasta octubre.
Esto explicó la baja en la cotización del nuevo dólar oficial, tras el descenso (de $ 1250) a $ 1.179. Lo cual restituyó la brecha entre el dólar oficial y el blue (este último quedó en $ 1225), posibilitando hacer diferencia entre ambas cotizaciones y luego aprovechar para pedalear con las tasas en pesos más elevadas [NdR: y finalmente volver a posición en verde].
A pesar de no haber sido como la que se difundió, el levantamiento parcial de regulaciones cambiarias reanimó el interés por el “carry trade” o bicicleta financiera. De acuerdo al nuevo mecanismo -de bandas- los analistas prevén que la relación peso/dólar se mantenga cerca del promedio sugerido (de $ 1000 a $ 1400), dado el rasgo estacional por la liquidación de exportaciones agrícolas y la expectativa por controles que restan ser bajados del mapa.
De acá hasta pasada la mitad del año, el escenario macroeconómico y político provee cierto respiro para Casa Rosada e Yrigoyen 250. En cambio, las sombras se proyectan al trasponer el tercer cuatrimestre de 2025 y testear cómo evoluciona el grado de aceptación social acerca del mega recorte a los bolsillos de connacionales.
NdR, 17 de abril de 2025.
