F.P.
El afamado vaticinio de una pitonisa –o será mejor pitonUSA?-, respecto a los próximos recursos por los que vendrían intereses sinárquicos parece posarse en estos días por los alrededores de calle España 887. Este envión por el agua en este caso, apunta a la firma que la procesa (además de encargarse del servicio de cloacas), la que en vista de los desequilibrios financieros que la aquejan observa el merodear de un halo privatizador.
Poco más de un año atrás, el 24 de mayo de 2019, uno de sus gerentes tuvo la visión de alumbrar una empresa denominada “Aguas Transparentes”, con forma de sociedad anónima simplificada. Como su impulsor figura el ingeniero Normando Fleming, actual integrante del directorio de Aguas del Norte, entre una quincena de flamantes colegas, quien de acuerdo a una publicación del periódico Cuarto Poder que apareció este fin de semana, es el que hace soplar esto vientos.
En esa armazón, el ingeniero con domicilio en Altos de San Lorenzo, a pesar de contar mensualmente con emolumentos por encima de lo que cobra el Gobernador de la Provincia, definió que esta “Aguas Transparentes” se asigna la misión de “desarrollar por cuenta propia, de terceros, asociada con terceros, y/o de cualquier otra forma de organización, las siguientes actividades: captación, potabilización, tratamiento, transporte y distribución de agua proveniente de fuentes privadas”. Una gemela de Aguas del Norte.
Tal vez por ello, la Secretaría de Recursos Hídricos salteña inició en junio del año anterior un expediente en el que la Jefa del Programa Jurídico, Silvia Santamaría, advirtió que la SAS de Normando Fleming se dio como misión exactamente la misma que la firma estatal que desde 2009 cuenta con un decreto que le otorga el monopolio en dicha prestación. En su conclusión, la letrada dejó en claro que hasta tanto “no se modifique el Decreto de concesión a favor de COSAySA, el pedido de constitución de ´Aguas Transparentes SAS´” resultaría al menos sospechoso.
Esta osadía de un gerente de la compañía hoy a cargo del servicio de agua potable y cloacas, se supone, debe ser un precedente que le genere alteración de los nervios a su actual titular, Luis María García Salado. Más teniendo en cuenta que, además de los abultados salarios que percibe, Fleming tampoco eludió los mimos de asentir que Aguas del Norte le subvencionase cursos para ejecutivos dictados en el IAE, o escuela de negocios de la Universidad Austral.
Sin hesitar, hacia estas jornadas de capacitación conocidas como Executive Master of Busines, el ingeniero Normando Fleming fue derechito en 2011 por segundo año consecutivo. Por ellos, COSAySA obló $ 26.544 según consta en el detalle de saldos correspondiente a la 3° y 4° cuota del extravagante (para un gerente de firma estatal) cursillo conocido como EMBA Regional, dictado en la casa de estudios que se gratifica en formar los gerentes más aventurados para compañías del sector privado.
De acuerdo a lo que consta en los libros de Aguas del Norte, la factura N° 0001000035219 ingresada el 30 de junio de 2011 cubrió la cuota número 4 por la participación que Fleming tuvo en el 2° año en el EMBA Regional del IAE. Fue por un monto de $ 13.272,00. Un mes después, el 30 de julio de aquel mismo año, COSAySA consignaba el ingreso de la factura 00010000035220 con la que se abonaba la cuota 3 que le posibilitara a Normando participar de esta misma edición del EMBA, por otros $ 13.272,00.
Todo un dandy con el dinero estatal, pero que ahora desde esta conformación de Sociedad Anónima Simplificada y el nombre “Aguas Transparentes” se apresta a dar un nuevo salto, en caso que el diagnóstico financiero de la estatal que supo ofrecerle vituallas y confort concluya con el pulgar hacia abajo.
NdR, 27 de junio de 2020.
