El shock bursátil con que se decodificó la reimposición de restricciones cambiarias le empardó al nivel crítico de la confianza en el rumbo violeta. Mediante esta nueva introducción de prohibiciones para operar con `dólares financieros´ se volvió a mellar la confianza gubernamental. En plena campaña electoral, territorio implacable a la hora de disculpar tropezones.