El gran viraje impreso a la economía -motor de la historia mundial- desnudó hasta dónde llega la cada vez más difusa idea de socio o aliado. Con ello se topó el mandatario argentino, luego de su más reciente peregrinación hacia Gringolandia. Con casi nada en las alforjas, llega el momento en que el mileidismo posiblemente requiera hacer un replanteo general de la gestión.