La adrenalina se mezcla con la actitud taimada de quienes integran el núcleo más duro en el que se asienta la gestión mileidiana. Mucha euforia en el catastro bursátil convive con un incipiente manierismo al momento de invertir a mediano y largo plazo. Una contraposición de amagues y acciones que intentaremos desentramar en los siguientes párrafos.