#SenadoPresupuesto
F.P.
De acá al jueves 26, Casa Rosada alimentará el cotilleo sobre eventual veto al Presupuesto, alternando con la amenaza de otro año de gastos a discreción y presión a Gobernadores bisoñé. Teóricamente el penúltimo día de la semana venidera el Senado sesionará para evaluar el texto, con media sanción de Cámara baja y una disconformidad -a lo mejor impostada- en Balcarce 50.
En la Cámara alta, si los senadores oficialistas insisten con el texto original que elimina fondos para Discapacidad y financiamiento universitario la iniciativa deberá volver a Diputados. Con lo cual la meta violeta de completar este año con una norma que sirva de guía para planificar ingresos y gastos, tanto para sus funcionarios como para terceros (municipios y provincias, principalmente), quedaría incumplida.
En tal contexto, la hipótesis del traspié calculado resulta atendible porque mantiene la tesitura mileidiana de ajustar la correa a quienes tiene cerca. De hecho, un 2026 sin Ley de Presupuesto sostiene la discrecionalidad en el manejo administrativo, de paso que la prerrogativa de negar fondos a discapacidad y universidades le posibilita achacárselos a quienes defeccionaron desde las provincias.
El Test Hachiko al que la gestión violeta somete a nuevos aliados y aspirantes a serlo constituye un paso inexorable. Esta prueba de alineamiento y balanceo quedó ejemplificada en la última sesión del miércoles en Diputados.
Con la supresión de fondos al macrismo porteño, por un lado, y la entronización de la ex diputada saenziana Pamela Caletti a la Auditoría General de la nación, por el otro. Un delivery de Recompensa & Castigo que debe estar presente hasta en la organización social más básica y primitiva.
De hecho, el encuentro parlamentario del miércoles/jueves concluyó con la amenaza del macrismo de acudir a la justicia por esta disputa de fondos para la Ciudad de Buenos Aires. En tanto, los diputados Yolanda Vega y Pablo Outes votaron (incluso en contra de lo expresado meses atrás por ambos) las quitas en Discapacidad y educación superior, alfombrando el camino a su ex compañera de bancada -Caletti- a la AGN.
En Casa de Gobierno conocen la hipótesis de Mauricio Macri, quien supone un traspié en la gestión que llevará a la fuerza violeta a diluirse. A la espera de esta señal, el ex mandatario nacional aguarda, permanece agazapado e intenta hilvanar por lo bajo.
Mientras que la fe en las provincias le resulta mucho menos onerosa al oficialismo nacional. Más allá de conchabos y cuestiones menores, el ejemplo de cómo Balcarce 50 actuó en relación a Misiones es ilustrativo. La provincia litoraleña proveyó el miércoles para votar junto al mileidismo a tres diputados nacionales (Arrúa, Ruiz y Vancsik), antes recibió $ 12.000 millones en ATN.
Pero al computar la baja de la Alícuota de Impuesto a las Ganancias a Sociedades esta provincia dejará de percibir, en coparticipación, más de 5 veces la cantidad girada por Casa Rosada en ATN. Lo que a mitad de semana el economista Hernán Letcher resumió -válido para todos los distritos- como que les “chorean $ 100, les devuelven $ 20, y no dicen nada”.
En relación a este escenario, este jueves hubo reunión para un ajuste táctico en Casa Rosada. Además de los Hermanos Milei, participaron de este cónclave el jefe de Gabinete, Manuel Adorni la senadora Patricia Bullrich el ministro del Interior, Diego Santilli el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem el asesor presidencial Santiago Caputo, y el secretario de Asuntos Estratégicos, Ignacio Devitt.
En este cónclave, una de las palabras más oídas fue “reseteo” del nexo con legisladores y Gobernadores bisoñé. La partitura indica que debe ser seguida al pie de la letra en el abordaje del Presupuesto 2026, así como en las sucesivas reformas como la laboral que quedó para el 10 de febrero próximo.
En el trayecto, los violeta echarán más piedras al morral de las provincias en la obtención de esta muestra de verticalidad (Test de Hachiko) o nada. A sabiendas de la apretada agenda que habrá hasta el 26 D, con fiesta navideña y reuniones de comisión en el Senado, o de lo contrario el próximo año será otro más sin Ley de Presupuesto.
NdR, 19 de diciembre de 2025.
