Lineamientos de gobierno huraño

- ASUNTOS DE FONDO

Lineamientos de gobierno huraño
Lineamientos de gobierno huraño

La reticencia al diálogo por parte del oficialismo puso en niveles críticos el modelo de relacionamiento provincial. Un problema que se agudiza por igual en la comunicación externa y en la comunicación interna. Por ello, un repaso a hechos recientes que exponen falencias al respecto.

#Gestionenoff #Derribodelaunidireccionalidad

F.P.

La transversalidad en la falta de diálogo achacada al gobierno provincial parece ser rasgo de gestión, hasta para los propios que de a poco están dejando de serlo. Las dimisiones en Cultura y Salud difundidas el pasado fin de semana, apenas son la punta del iceberg respecto a esta línea de conducta huraña de acuerdo a la cual son mayoría los funcionarios reticentes a contestar el menor requerimiento periodístico.

Este accionar se extiende aún a casos triviales, entre los cuáles podemos ejemplificar el de un colega metropolitano que nos tocó atestiguar recientemente. Sólo unos días atrás en la previa a la visita del ministro de Economía de nación Martín Guzmán, el reportero especializado no pudo dar con respuesta alguna ante un requerimiento informativo de lo más corriente (lugar de la conferencia, horario, duración de la visita, etc.). Y en vano fueron sus gestiones ante Secretarios de Estado o ante la privada del Gobernador.

Una comunicación interruptus que registran con frecuencia cotidiana los medios de prensa salteños, siempre que intentan un verdadero intercambio con alguien que integra el elenco saenziano. El temor a la auténtica pregunta está garantizado por esta modalidad, según la cual solamente los micrófonos puedan captar las novedades favorables al oficialismo (que en estos días se dan a cuentagotas, son triviales o nulas, según el parecer del escudriñador).

El modelo unidireccional, en base a lo que se aprecia desde el inicio de la gestión provincial y hoy resulta evidente, aterriza tanto en el plano de la comunicación externa como en la comunicación interna. Un problema de lo más agudo, acerca del cual aportaron su malestar una Secretaria de Estado, un gerente hospitalario del norte y otro colega del sudeste, junto a la comisión directiva del nosocomio!  

La dimitente como Secretaria de Cultura, Sabrina Sansone, fundamentó su determinación en una mezcla de campaña sucia, aprietes, advertencias no ortodoxas, recorte de fondos e interferencia para su ejecución. Con su decisión, la ahora ex funcionaria alegó poner fin a “extorsiones y condicionamientos de sectores que solo piensan en el beneficio propio por encima del bien común”, alertó, por lo cual habrá que poner la lupa en quienes la reemplacen.

Igualmente advirtió que se “malgasta el erario público en gente que no valora su trabajo y que le hurta el dinero a todos los Salteños sin ningún tipo de remordimiento o culpa y mucho menos aun amor o voluntad a trabajar”. Un entramado que deriva en lo que consideró “difícil gestionar atada de pies y manos”.

En términos similares, el ex gerente del Hospital Juan Domingo Perón (Tartagal), el médico Santiago Payo, argumentó su éxodo. El galeno explicó, casi en tono de disculpa, que “si en algún momento tomé la palabra diciendo lo que este hospital necesitaba, lo hice porque creo que existe la libertad de expresión para todos los ciudadanos de este país”.

Aunque si tal conducta alteró la hipersensibilidad gubernamental, dicha “molestia debe cambiarse por acciones”. De todas maneras, se encomendó en última instancia a “quienes deciden la salud de la población se hagan ver”, a fin que la ciudadanía cuenta con “profesionales y edificios”, aunque más no fuere, remató.

En cambio, el ahora ex gerente del Hospital Oscar H. Costas (Joaquín V. González) Eduardo Acuña resumió su decisión en que “no podemos hablar”. Consideración que asintieron sus colaboradoras Natalia Sorayre y Fátima Castro, quienes también siguieron el mismo curso de acción que Acuña. 

Más allá del estruendo verbal ocasionado por esta síntesis, los médicos anteños finalmente alcanzaron a exteriorizar la situación enclenque en que a duras penas anduvo este centro de atención en salud. Y que ahora se enfrenta a un desmantelamiento en el plantel de prestación de servicios, despidos, falta de medicamentos, instrumentos hospitalarios y hasta un persistente déficit de comida para los pacientes. Una ponencia efectuada el pasado fin de semana, a contramano de una irascible funcionaria de la cartera provincial. 

Un panorama inocultable en el que un mix de manierismo, negligencia y obturación de canales desemboca en inconveniente parejo: graves falencias en la comunicación interna como en la comunicación externa. Nada menos!

NdR, 23 de mayo de 2022.   


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